Entre gigantes columnas,
Calmo transcurre, a veces
Bravío, otras, tempestuoso.
Infinidad de almas
Albergan tus entrañas.
Cuando a tu lado me acerco
Veo plenitud y vida.
Pequeño brazo de mar
Entre columnas gigantes,
Pareces incitar, ¡dad un salto
Y pasead a mi otra orilla!.
Orilla de la que parten
Seres desesperados,
Seres que buscan
Un mundo mejor.
Pequeño brazo de mar
Entre gigantes columnas,
Al saltar desde esa orilla,
Muchos naufragan y mueren.
Otros quedarán marcados
Por mil experiencias vividas
En esa travesía de horror,
Rostros de miedo y desolación,
Tristeza, pena y dolor.
Pequeño brazo de mar
Entre gigantes columnas.
Nunca fue barrera el mar,
Ni el desierto,
Ni montañas escarpadas,
Ni cumbres heladas.
Nunca nada detuvo al hombre
En su busca de felicidad.
Mas todo cambia cuando
Al fin descubrimos, que la felicidad
Está en uno, no en cualquier lugar.